Robert Smith y su pelea con Morrissey

En una entrevista concedida a la revista NME respondió a una pregunta referente a su pelea con Morrisey hace años.

Por desgracia le preguntaron sobre gente que se apellida Smith. Eramos yo, Patti Smith y otro Smith que era famoso en aquella época, y la pregunta era a quién dispararía. Uno habría esperado que él siendo un tipo vegetariano que nunca come carne y pacifista dijera: “preferiría dispararme a mí mismo” o “a ninguno”, pero dijo: “los pondría a todos juntos y les dispararía a todos”.

Patti Smith,madrina del punk

Palabras de Morrissey sobre The Cure: 

"The Cure una nueva dimensión de la palabra mierda." 

Robert Smith contesta: "Por lo menos hemos dado un nuevo significado a la palabra, no construyó una carrera fuera de ella".

Aún hoy se ignora cuál fue el detonante del conflicto. ¿Es cierto que The Cure irritaron a los Smiths copiando el festín floral de los conciertos? ¿O fue Robert Smith otra víctima colateral de la incontinencia verbal de Morrissey? 

Hasta la fecha ninguna explicación convence tanto como el certero análisis de algunos aficionados que, aprovechando uno de esos irrepetibles retruécanos sintácticos del inglés, apuntan a “ideologically conflicting hairstyles”. Hablamos en efecto de dos personajes sansonianos para quienes el pelo era más que la fuente de células muertas que nos brota del cráneo al común de los mortales. 

Un corte de pelo despertaba tal furia en Robert Smith que ponía su hogar en Defcon 2 cada vez que visitaba la peluquería. Morrissey, un hombre capaz de atravesar el Atlántico para visitar a su peluquero de confianza, llegó a declarar: “Long hair is an unpardonable offense which should be punishable by death”. 

Enfrentados para demostrar quién era más desgraciado los líderes de dos de las mejores, qué digo, las dos mejores bandas de los ochenta, terminaron enzarzados en un tiroteo dialéctico que duraría más de una década.

No hubo reconciliación posible, mientras uno aprovechaba la menor ocasión para recalcar que su rival necesitaba con urgencia un filete y un polvo, el otro redoblaba su defensa del celibato porque “.. the only person worthy of having sex with me, is myself” y hacía sangre en las crecientes redondez de su rival. Porque Robert Smith engordó, sí, pero sólo como imperativo moral de la contienda: “If Morrissey says ‘don’t eat meat’, then I will”. Fuente

Lógico, también su némesis capilar estuvo a punto de dejar a un lado sus más arraigados principios tras conocer la determinación del enemigo: “If he became a vegetarian, I’d start eating meat again”, dijo. Fue una lucha sin tregua que con el transcurso de los años llegó a consolidar entre ellos cierto entendimiento, cierta sincronía: 

Morrissey – Robert Smith is a whingebag. 

Robert Smith – Morrissey is so depresssing. If he doesn’t kill himself, I’ll probably do. 

Morrissey – I’d rather be shot to death, than been seen in converse shoes.

Sí, líneas dignas de dos de las mejores plumas de la música contemporánea. La disolución de los Smiths y el posterior exilio de su cantante no supuso el fin de las hostilidades como muchos incluído el propio Robert Smith, creyeron: “Cuando por fin crees que te has librado de Morrissey porque se ha ido a América, te despiertas por la mañana y ahí está Brett Anderson”. 

Un insulto devastador, atroz, tanto que Morrissey decidió comenzar todos los conciertos de su gira en solitario con presentaciones del tipo: “As some of you know I used to be in an 80s band called The Cure. As you can see, I’m slimmed down quite a bit since then”, seguidas por lo general con la desenfadada tonadilla “You’re the one for me, fatty” sin prever que los años, traidores, se vengarían un día en sus propias carnes.

Aquí les comparto el vídeo, espero les guste el post!! No olvides compartir